Vivimos en la época de la "mega-motivación", donde más o menos todos tenemos claro que debemos luchar a toda costa por nuestros sueños o metas, y no rendirse jamás en el camino. Persistir cuando llegue la adversidad, e insistir aún más cuando la cosa se ponga fea. Que los fracasos no te detengan y usar cada ladrillo para construir tu propio castillo; que quien la sigue la consigue, y que quien se esfuerza y no se da por vencido, tarde o temprano acaba alcanzando su meta si lo ha dado todo por conseguirlo.
Y lo más importante es que nunca hay que abandonar, pues sólo los cobardes, los débiles y los fracasados abandonan. La gente de éxito no.
Y todo ésto se suele representar con esta imagen que se muestra a continuación y que representaría la importancia de persistir y no abandonar, porque quien abandona pierde la recompensa que se escondía tras los obstáculos.
Pero en esta imagen, también tendríamos la evidente pregunta: ¿qué pasaría si estos señores estuvieran picando piedra en el sentido contrario?
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Y lo más importante es que nunca hay que abandonar, pues sólo los cobardes, los débiles y los fracasados abandonan. La gente de éxito no.
Y todo ésto se suele representar con esta imagen que se muestra a continuación y que representaría la importancia de persistir y no abandonar, porque quien abandona pierde la recompensa que se escondía tras los obstáculos.
Pero en esta imagen, también tendríamos la evidente pregunta: ¿qué pasaría si estos señores estuvieran picando piedra en el sentido contrario?
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