Un día un hombre encontró un huevo de águila y lo puso en un nido de un pavo de corral junto al resto de huevos. El águila nació rodeada de pavos, criada por pavos y por tanto, haciendo lo mismo que hacían los pavos. Creció pensando que era un pavo, alimentándose de gusanos e insectos.
Conforme pasó el tiempo, miraba al cielo y veía algunos gorriones volar. Sentía envidia, pues los pavos no pueden volar. Soñaba con volar a pesar de ser consciente de que nunca podría hacerlo.
Continuar leyendo...