Poco a poco las personas comienzan a perder el respeto o admiración hacia los economistas. Quizás
muchos pensaban que la economía era una ciencia donde unos señores ajenos al color político eran capaces de predecir, presagiar o tomar decisiones basándose en sus cálculos, unos cálculos que actuarían como una ciencia donde si hago "A" tendré el resultado "C - B", y por tanto llegaré a "D" en un tiempo "E".
Pero lo cierto es que
los economistas están condicionados a un sesgo político, donde según sus creencias políticas, así será su visión particular del mundo.
Continuar leyendo...