En plena crisis económica, muchas empresas se han visto obligadas a cerrar mientras otras han visto caer su facturación. Mientras tanto,
una oportunidad de negocio se ha abierto con las tiendas eróticas, gracias a que las personas ya no tienen tantos tabúes con estos temas, además de que las nuevas tiendas eróticas ya no son los viejos Sex-shops donde había que abrirlos en un lugar escondido y la mayoría de los clientes entraban con gorra, gafas de sol y cabeza agachada. El sector ha cambiado mucho desde entonces.
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